LÓPEZ SEMPERE, VALENTÍN
Vida
Valentín nació en el barrio de Santo Ángel, en Murcia el 3 de junio de 2002. Tiene 16 años, mide 1,85 metros y pesa 65 kilos. Sus padres se llaman Valentín López Escribano y Ana Leonor Sempere Sánchez, sus hermanas se llaman Ana María López Sempere, Cristina López Sempere y Diana López Sempere. Empezó a jugar al tenis el 11 de febrero de 2012, en el Club de Tenis de Algezares, cuando entró junto a sus hermanas y sus amigos estuvieron antes que él, pero cuando intentaba darle a la bola, se la tragaba y también le costaba sacar. En los años 2012 y 2013 no ganó ni un trofeo, aunque en las escuelas de verano ganaba una medalla cada año.
Vida como tenista
Pero en el año 2014 mejoró un montón, ganó 4 partidos y perdió 3, llegó al número 1, porque era muy bueno y le dieron mi primer trofeo por el esfuerzo y la entrega, como recompensa fue a una playa de Murcia con su familia. Al empezar su tercera escuela de verano ya tenía nivel medio, hacía muchos golpes buenos y ganaba muchos puntos, los críos le admiraban. El miércoles 29 se fue a Marbella con sus abuelos y sus hermanas como recompensa de lo buen tenista que estaba hecho, fue el mejor verano de su vida, una experiencia fantástica.
Lamentablemente el 2015 fue el peor año de su vida, porque no ganaba ni un solo partido, ni un solo trofeo, aunque ganó su tercera medalla de la escuela de verano, pero también hacía buenos puntos y todo, hasta sus rivales le aplaudían. Un ejemplo fue cuando jugó un punto contra Nico Almagro que fueron cuatro derechas y por último un revés cruzado a dos manos que Almagro la falló, los del Club gritaron Valentín es el mejor. De repente llegó el año 2016, las cosas cambiaron por completo, porque ganó 5 partidos y solo perdió 1, en la entrega de trofeos le dieron el trofeo de campeón y todo el club de tenis le aplaudió, se sintió muy contento, en la cuarta escuela de verano le salían cada vez mejor los golpes directos, incluso cuando sus amigos, sus profesores y él jugaron al pádel, mostró un gran nivel. Hizo dos partidos, el primero fue ante Paco Vernal Verdadero, que le ganó 15 - 12 y el segundo fue contra Mario Pastor, aunque perdió 17 - 15, pero le remontó cuando iba 9 - 0 abajo, menudo partidazo. Como recompensa se fue a Marbella por quinta vez para disfrutar jugando al tenis en el club de tenis de Marbella y en la pista de tenis de su abuela Manoli con toda su familia.
En septiembre de 2016 alcanzó un alto nivel, porque le pusieron contra unas chicas de su nivel, pero no podían contra sus derechas, a veces reveses, dejadas o remates, sus profesores Antonio Alcaraz, José Aliaga y Jorge Palacios se pusieron muy contentos con él. A principios de 2017 las cosas cambiaron, porque perdió 1 partido, que era el más importante, pero los otros 4 los ganó y quedó subcampeón en la entrega de trofeos, debido a que estaba lisiado. En la quinta escuela de verano aunque casi no ganaba, pero hacía unos puntazos maestros como reveses cruzados, paralelos o invertidos, al igual que las derechas, remates, boleas e incluso dejadas y globos, los profesores y sus rivales se fijaban en él, esta fue una de sus mejores escuelas de verano de su vida, la recompensa siempre fue su sexto viaje a Marbella para que pudiera hacer lo que quisiera, hacer amigos en la playa, jugar algún partido de tenis, salir a cenar con mi familia y comprar cualquier cosa, fue un año magnífico para el famoso Valentín López Sempere.
En el curso 2017 – 2018 conoció a 5 nuevos amigos, Quique Parra, Antonio Manuel, Luis Miguel, Arturo e Irene, al principio pensaba que no iba a ser amigo de ellos, pero poco a poco le iban cayendo mejor, porque él les hacía reír con sus payasadas y sus divertidos puntazos, le llamaron el Kyrgios. El problema es que se fue Antonio Alcaraz, le sustituyó Ángel Luis, que le trata mejor y desde que le conoció le encantaron mucho sus golpes al igual que Palacios. Hoy en día ha jugado dos partidazos, el primero fue contra Quique Parra, este estuvo a punto de romperle el saque y colocarse 2 - 0, fue un punto difícil, pero terminó solucionándolo con un remate sin bote cruzado, vaya puntazo y finalmente ganó 4-2, no se lo creía. El segundo fue contra Antonio Manuel, sacaba para el 3-1, le hizo un resto de revés cruzado, se lo devolvió con un revés paralelo y plano que se lo tragó, pedazo golpe directo. Lo malo fue que este le empató a 3 ganando con su servicio y rompiéndole el saque, porque hizo tres dobles faltas. Al final ganó 7-4 en la muerte súbita, pero fue un partido alucinante y extraordinario, se fue contento a casa.
